Música

La Tierra De Los Sueños

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Tengo la teoría de que la música llega cuando la necesitás. No importa si creciste con una banda sonando en la radio, tal vez nunca le prestaste demasiada atención hasta que algo te hizo sentido. Me pasó con Virus, con Soda/Cerati y con ellos. Los Beatles me ayudaron a atravesar la adolescencia. Morrissey y Marr me hicieron creer que el escribir podía ser algo más que cuadernos acumulados en cajones bajo llave. Tengo una lista llena de canciones para momentos difíciles, mi SOS playlist. Hace casi dos años mi vida se derrumbó por completo y ninguna de ellas me servía. Pasé meses sin música, un año de terapia y me di cuenta que tenía que reconstruirme de alguna manera, reinventarme para sobrevivir y tratar de ser lo mejor posible para los míos. Necesité música. Un poco por mi novio y otro poco por Johnny Marr, encaré una escucha integral de discografía en Spotify y descubrí la que desde entonces es la banda sonora de mi reconstrucción personal. Tenía que ser algo nuevo para mí y que al mismo tiempo conectara con mi infancia. Porque para mi generación Always On My Mind es un tema de ellos. La de Elvis es el cover (intenten escucharla sin extrañar los teclados). Tenía que ser lo suficientemente profunda para encontrarle sentido (porque la felicidad acrítica nunca fue lo mío), pegarla justo ahí donde flaquea New Order (que de todos modos es la otra gran banda que me acompaña en este proceso). Synth pop e historias. Buenas historias. ¿Y cómo no me voy a identificar con una que habla de citar canciones, yo que todo lo digo con música?
Afortunadamente, tengo mucho para escribir sobre Neil Tennant y Chris Lowe, mucho más de lo que abarca el BUE, Super o este comentario. This is my kind of music.
“La vida es mucho más simple cuando sos joven”. Necesitamos que el arte sea lo suficientemente fantástico para estimularte a imaginar otro mundo posible y lo suficientemente concreto para ayudarte a lidiar con la realidad. Eso son “Los Pibes”. El sábado a la noche fueron casi dos horas bailando A PESAR de que el mundo sea un lugar hostil. Casi como resistencia vital. Hay que bailar.

The Music will never fade away.

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